La primavera no solo nos ofrece un respiro, sino que nos invita, de una vez por todas, a celebrar las pequeñas cosas que hacen que la vida merezca la pena. Este ha sido precisamente el momento escogido por el icónico hotel Marbella Club Hotel Resort & Spa para abrirnos las puertas a un nuevo paraíso terrenal. De esta forma escribe un capítulo más en su historia con el lanzamiento de Clubhouse, un rincón muy especial donde el espíritu Mediterráneo es el gran protagonista. Un idílico aspirante a convertirse en el punto de encuentro de locales y huéspedes en la afamada Costa del Sol. Espacios en constante movimiento, atemporales y multigeneracionales que inducen sutilmente a beber, comer, reír y brindar.
Fielmente inspirado en los orígenes del hotel allá por los años cincuenta. Entonces, este emblema de la Costa del Sol servía como lugar de reunión al príncipe Alfonso Von Hohenlohe y algunos de sus flamantes amigos como Brigitte Bardot y Cary Grant. Esta sublime reinvención del Marbella Clubhouse original defiende las mejores cosas en la vida: la comida y bebida, la diversión, la naturaleza, la amistad y la familia. Aquí los huéspedes y visitantes podrán disfrutar de cinco espacios inimitables: El Patio, La Bodega, Rudi’s, El Grill y Summer Bar. Sin dudas, un lugar donde quedarse a vivir.

Una esencia muy característica: el espíritu Mediterráneo en su máximo esplendor
El hotel siempre se ha inspirado en el estilo de vida de Andalucía, apostando por una esencia Mediterránea elevada a la máxima potencia. Así, con este objetivo y para dotar al hotel de un ambiente tranquilo y relajado, propio de un pueblo andaluz, predominan los espacios abiertos y conectados entre sí. Las interioristas Marie-Caroline Willms y Johanna Haniel, del estudio de diseño español EMCI Interiors, han trabajado para conseguir la sensación de un movimiento fluido entre estancias. En todas ellas priman los materiales naturales que se utilizaron en el diseño del hotel en sus orígenes. Bambú, teca, cerámica pintada a mano o terracota.
Clubhouse nace de la sencillez y la afabilidad. Un lugar pensado para disfrutar o trabajar, para el día o para la noche, para los jóvenes y más adultos. Una flota de talentosos creadores: desde artistas, artesanos y diseñadores hasta mixólogos y chefs, toman las riendas. Así es como combinan magistralmente sensibilidad e innovación con las raíces atemporales y “perfectamente imperfectas” del hotel.
Una mirada más cercana
Restaurante El Patio: saborea un Mediterráneo sin precedentes
Un lugar especial que cautiva por un ambiente elegante y sofisticado a la vez que vibrante. Aquí se respira la esencia más pura de Andalucía. El nuevo restaurante de Marbella Club estará abierto todo el día invitando a los huéspedes a reunirse para charlar, disfrutar de zumos matutinos, tapas, un almuerzo o una cena relajada en cualquiera de sus espacios. Bajo la pérgola, junto a las vides o en familia alrededor de una gran mesa de madera.
El chef ejecutivo, Armando Codispoti, será el encargado de deleitar a sus comensales con un menú que se inspira en la Riviera mediterránea y las costas Bereberes. Una propuesta relajada de calidad basada en productos de temporada y locales de la cual no te puedes perder la sandía con aceitunas Kalamata, queso feta, menta y mermelada de chile limasu, su icónica ternera milanesa, los mejillones gallegos o cualquiera de las pizzas al horno de leña acompañadas de su coktail botanic.
En el mismo lugar donde una vez estuvieron las 13 habitaciones originales del hotel, se encuentran dos espacios perfectamente complementarios y conectados que evocan un sentimiento mediterráneo único. Uno, en tonos azules y verdes vibrantes con un atractivo diurno y animado; mientras que el otro se inspira en un glamour nocturno, con muchos detalles en un tono rojo rubí propio de los teatros.
No obstante, en lo que a interiorismo respecta, el protagonismo reside en una gran chimenea. Así, con esculturas de tritones elaborados de manera artesanal por el dúo sevillano Exvotos y con motivos inspirados en los mitos de los océanos, este recodo promete cautivar todas las miradas. No te pierdas la barra circular inspirada en la plaza de España de Sevilla, todos sus detalles cuentan una historia.
La Bodega: un guiño a los amantes del buen vino
Un homenaje en vivo a las más de 400 referencias que forman la carta. La Bodega recoge, de forma meticulosa, la historia de bodegas familiares locales con un único propósito: deleitar a sus huéspedes. Una de las características de este espacio es su techo con efecto ondulado, los elegantes paneles de madera de cerezo y luces sutilmente ocultas. La Bodega se convierte así en el lugar perfecto para catas privadas. Aquí, el sommelier Ángel González utiliza una variedad de herramientas como tierras o cuernos biodinámicos para darle color a estos encuentros.

No pierdas la oportunidad de adentrarte en el acogedor comedor privado del Clubhouse. Un espacio ideal para ocasiones especiales, catas de vino y eventos íntimos. Aquí se pueden degustar menús elaborados a medida y puesta de mesas originales para disfrutar de los momentos de ocio. Las paredes están tapizadas con un alegre lino bordado con caprichosas ilustraciones de templos mayas; los muebles de color verde azulado, turquesa y jade se suman a la sensación de espacio jovial.
Rudi’s: un bohemio homenaje en forma de refugio de invierno
Solo hay un conde Rudi von Schönburg y, por tanto, solo hay un Rudi’s bar. Y este, indiscutiblemente, no podía estar en otro lugar que no fuese en el nuevo Marbella Clubhouse. Rudi’s responde a un elegante homenaje al que fuera y es el primer director general del Marbella Club. Definido como un acogedor y bohemio refugio de invierno, pensado para ser el escenario donde brindar con champán y acompañarlo de unas tapas, concursos de backgammon y cócteles por la noche junto a la chimenea. Todo ello, amenizado con música en vivo.
Diseñado para evocar la sensación de una sala de estar familiar. El atractivo de Andalucía se materializa en obras de arte inspiradas en la Alhambra, taburetes con borlas como las que lucen los caballos jerezanos y un tablao flamenco para aquellas actuaciones improvisadas. En la sala también luce una espectacular chimenea con conchas incrustadas que hace un guiño al mar Mediterráneo e incluso encontramos un majestuoso tigre presidiendo el escenario. Descubre la personalidad arrolladora de Rudi’s, no tiene competencia.
Los clásicos indiscutibles del Clubhouse
El Grill: para los amantes de las brasas
El maestro parrillero de El Grill, Roque Juárez Junior, continúa el legado de su padre en Clubhouse. Aquí ofrece recetas clásicas que se cocinan en la misma parrilla de bronce en la que trabajó Roque Juárez, su padre y predecesor. Abundan los platos de carne: suculentos cortes como el tomahawk y el chuletón, servidos con la famosa salsa Roque; al igual que los clásicos como el Soufflé de Queso Parmesano o pato a la miel. Un ambiente tradicional, ceremonial y romántico sirve como broche de oro a una oferta gourmet de la más alta calidad.
Summer Bar: vuelta a las noches de verano interminables
Si sigue el aroma del jazmín y la flor de azahar llegará al discreto y afable Summer Bar. Aquí las noches de verano prometen ser interminables. Summer Bar es ese rincón donde la melodía del piano y el murmullo del mar han puesto la banda sonora de noches inolvidables desde los años cincuenta. Los elegantes cojines con estampados de cítricos y bancos de obra invitan a descansar y desconectar durante horas. Déjate seducir por su ambiente, regresarás seguro.