Construye tu imagen personal desde las emociones

Desde hace algunos años, los europeos hemos normalizado y visto más que necesario tener un Coach para diferentes áreas de nuestra vida: alimentación, deporte, imagen, emoción, etc.

Antes ignorábamos nuestras necesidades, o quizá más bien, no conocíamos este fenómeno de que alguien ajeno a nuestro entorno, pudiera acompañarnos a hacer un camino de evolución y despertar. La historia del coaching se remonta en la época de Grecia y Roma donde Sócrates fue uno de los propulsores de poder hacer del diálogo una maestría para que el ser humano se desarrollara a través de cuestionarse. Y es que ya lo decía Sócrates:

Contenidos

“La verdadera sabiduría está en reconocer la propia ignorancia”
¿Por qué y para qué necesito crear mi imagen desde el crecimiento personal?
Cómo hacer crecer la parte emocional ligada a la imagen personal gracias al coaching

“La verdadera sabiduría está en reconocer la propia ignorancia”

¿Por qué y para qué necesito crear mi imagen desde el crecimiento personal?

Es una realidad el hecho de que una parte de nosotros vive en la irrealidad provocada por el desconocimiento. Esto influye en la armonía de la belleza que somos, ya que en numerosas ocasiones somos incapaces de vernos en un vídeo o en una foto, o nos criticamos porque tenemos una idea distinta de lo proyectamos y esto nos causa rechazo al vernos.

En este sentido, el coach actúa como un facilitador, que a través de preguntas bien seleccionadas te acompaña a que alcances conclusiones para autoconocerte y brindarte la posibilidad de saber qué camino quieres llevar, y lo más importante: saber cómo hacerlo para encontrar la motivación y no quedarte a mitad de camino. Lo mejor de todo, es que una vez que decides tomar esta decisión, poco a poco vas despertando a la bestia que llevas dentro llamada marca e imagen personal.

Es entonces cuando te das cuenta de que los demás te reconocen por lo que ven de ti. Es como llevar una insignia que informa de lo que te da éxito porque has aprendido a funcionar a través de ella y a admirarla. Sin apenas tener que hablar, expresas con convicción quién eres y esto te abre puertas a las colaboraciones en sus diferentes facetas. Y entonces: ¡bualá! los demás comienzan a compran la idea que vendes de ti mismo. ¿Existe más lujo que ese?

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Cómo hacer crecer la parte emocional ligada a la imagen personal gracias al coaching

Trabajar diferentes ámbitos dentro del crecimiento emocional como la imagen personal y la autoestima resulta fundamental en este proceso. Gracias a un método específico que nos acompaña a conectar con nuestra autenticidad a través de la comunicación íntegra y que no solo comunicamos a través de las prendas que crean nuestros looks con los que decoramos nuestro cuerpo podemos alcanzar nuestra mejor y más coherente versión de nosotros mismos.

Así es como Duduyemi, coach experta en Imagen Emocional, estudia la comunicación no verbal para poder analizar qué gestos, expresiones faciales, posturas y somatotipos (cuerpos) nos sobran y nos restan, para que conozcamos qué proyección ofrecemos y cuales son las áreas de mejora a potenciar. Además, gracias a un acompañamiento durante todo el proceso, nos liberaremos las creencias que nos superan y dudan de nuestra belleza, llenándonos de comparación y de falta de aceptación, limitando nuestro poder.

De esta forma, Duduyemi nos propone tres consejos imprescindibles para empoderar la imagen personal que hemos creado de nosotros mismos hasta ahora:

1. Mírate al espejo y reconócete en una cualidad. Reconocerte es la primera clave para el éxito, no puedes poner la responsabilidad en otros para que sean ellos los que te digan lo que ven de ti sin antes haberlo hecho tú. Escúchate cada mañana, que sea lo primero que hagas para poder profundizar y averiguar qué opinión tienes de ti para poder situarte y comprobar qué es aquello que merma tu confianza. El oído es el sentido que nos permite captar tanto lo positivo como lo negativo de nuestra configuración mental. A través de él, podemos darnos equilibrio. Así, podrás elevar tu auto percepción y autoestima, comenzando a reforzar aquello que eres, sabiendo que justo eso es lo que te da la fuerza para iniciarte en el día.

2. Valora tres conductas positivas que aporte tu cualidad. Anota qué pensamiento, qué emoción y qué actitud te permite tener tu cualidad día tras día. Así podrás hacer una revisión de en qué porcentaje estás en ella para ir comprobando cómo eres o qué sucede en ti cuando te alejas de ella.“El verdadero poder consiste en obtener la verdad de uno mismo” . Y esa realidad suele estar contaminada por la falta de reflexión ante aquello (positivo) que no ves y que tampoco intentas ver. Una mirada limpia hará que consolides la parte que peor llevas de ti. Consiste en visualizar cómo eres sin que te cause rechazo, así que ¡no dudes en mirar qué regalos diarios te ofrece tu cualidad!

3. Incorpora una acción nueva que lleves postergando, la verdadera motivación se da cuando eres fiel a lo que te dices que vas a hacer y no te saboteas con excusas que incluso llegas a creerte. Para no caer en la trampa, primero mide qué puedes hacer y que no. Este empiece, te dará una perspectiva real de qué puedes proponerte y de cómo hacerlo para conseguirlo. Entonces sabrás que elaborar este camino, será un aprendizaje para saber algo nuevo de ti. Y eso querida, lee con atención: ¡ es el verdadero mérito del logro de un objetivo! Poner a tu disposición tu disciplina tiene como recompensa fortalecer el músculo del compromiso que crecerá y crecerá en la medida en que comiences a creer en ti.

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